Acerca de nosotras ·

jueves, 26 de febrero de 2015

Justicia para Emma S. de Riobamba ( Ecuador)


La justicia machista y patriarcal se ceba en una persona vicitmizada por su padrastro con el que tuvo un hijo que como para otras mujeres, su sola imagen  supone una tortura por recordarle la violencia de que fueron objeto y el futuro que les espera. 
Lo justo y lo que esperamos es que el juicio del que seguido hablamos sea anulado, revisadas las pruebas y se condene a todos los inculpados por el abuso contra una joven que no merecía el maltrato que sufrió, repartiendo responsabilidades sobre la acción final que desgraciadamente tuvo lugar.  
Esperamos que casos así hagan reflexionar a los legisladores de lo que supone hacer tener un hijo a una mujer víctima de una violación . 
¿Nadie se cuestiona ni responsabiliza al padrastro de Emma por su acción a una joven de 19 años ??


 OCURRIÓ EN RIOBAMBA EL 2 DE NOVIEMBRE DE 2014

El Tribunal de Garantías Penales de Chimborazo condenó a Emma S. a 34 años y 9 meses por el homicidio. La defensa apelará el tiempo de la sentencia.
12.685 días deberá pasar en prisión mujer que asesinó a hijo 

La pena de 34 años y 9 meses de privación de libertad dictada en contra de Emma S. por el asesinato de su hijo, de 2 años, en Riobamba, provincia de Chimborazo, es una de las más duras aplicadas desde que entró en vigencia el Código Orgánico Integral Penal (COIP).

El Tribunal de Garantías Penales de Chimborazo la sentenció el 12 de febrero al existir agravantes en el acto, pues la víctima fue parte de su núcleo familiar.

Diego Verdesoto, fiscal del caso, explicó que el artículo 47 del COIP, que refiere sobre las circunstancias   agravantes de la infracción, la considera si la misma fue cometida con ensañamiento en contra de la víctima. “El niño tenía dos golpes en la cabeza”, dijo.

Historia

Emma S., de 22 años, se dedicaba a vender legumbres en el mercado de Riobamba. El 2 de noviembre de 2014 había pedido a su madre, con quien vivía, que le cuide a su hijo, de 2 años, pero ella se negó, por lo que hubo una discusión familiar.  

Horas más tarde del mismo día, Emma habría empujado al niño al   interior de un canal de agua en el sector Los Alamos, en Riobamba, lo que le ocasionó la muerte.

El fiscal señaló que el proceso se inició con la desaparición del menor el 2 de noviembre en Riobamba, y el cuerpo fue encontrado el 6 de noviembre en el mismo canal, pero en el cantón Guano.

El mismo día, Emma fue  detenida por la Policía Nacional y, posteriormente, juzgada por el asesinato de su hijo.

Según sus familiares, ella padece problemas sicológicos, porque fue abusada sexualmente por el padrastro y su hijo fue producto de ese ultraje.

Sin embargo, el fiscal Verdesoto sostuvo que no se comprobaron los problemas mentales de la mujer, porque los exámenes no lo verificaron. “La próxima semana tendremos la notificación de la sentencia”.

Eduardo Coloma, defensor público que lleva el caso de Emma, manifestó que también se solicitaron 3 veces un examen siquiátrico, pero, lamentablemente, no se lo practicaron a su defendida.  

Coloma indicó que su defendida declaró que sufría mucho con el niño debido a que no tenía una buena relación con su familia, lo que la llevó a plantearse la idea del suicidio. “Al tener un hijo con su padrastro, prácticamente se convirtió en rival de la madre”.   

Al parecer esta situación provocó frustraciones en Emma llevándola a la desesperación para cometer un acto de esa naturaleza en contra de su propio hijo, y que pierda la noción de sus acciones, puntualizó el jurista. “Cuando se notifique la resolución de la sentencia se apelará la reducción de la pena”.

En opinión del sicólogo Gastón Tutivén, en este caso habría que analizar lo que representaba el niño para la mujer.  

“Podría ser que lo veía como un obstáculo para su nueva relación, el  recuerdo del hecho de abuso, o la imagen del abusador que posiblemente no ha sido sancionado por su acto”, explicó.

El profesional refirió que si la persona no posee los recursos para enfrentar determinadas representaciones, aquello afecta el estado emocional, llegando a conductas imprevisibles que no les permite  asumir  responsabilidad frente a determinados actos.

Una persona puede desplazar sentimientos de ira a su propio hijo -producto de una violación- si es que no se ha superado el suceso y que se presenta como estrés postraumático, agregó el sicólogo.

El artículo 140.1 del COIP establece una pena privativa de libertad de 22 a 26 años cuando la persona infractora ha dado muerte a sus familiares directos.

http://www.telegrafo.com.ec/justicia/item/12-685-dias-debera-pasar-en-prision-mujer-que-asesino-a-hijo.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario

HH

Más